Son muchas los eventos de festejo que se organizan en España a lo largo de un año, vemos así la Feria de Abril de Sevilla, el carnaval de Las Islas Canarias, las Fallas de Valencia, o la celebrada hace tan solo una semana, San Fermín, siendo esta última, el festival más internacional celebrado en nuestro país. Además para la actividad principal de la fiesta, muchos son los turistas que aprovechan la ocasión para visitar la ciudad, apreciando su belleza en monumentos, lugares culturales y disfrutando tanto del interior como de elementos como carpintería exterior.
La gran fiesta de los San Fermines comienzan con el lanzamiento del chupinazo, lanzado desde un balcón en el ayuntamiento de Pamplona, ciudad en la que se celebra este evento; sucede cada año un 6 de julio a las 12 de la mañana,terminando el evento completo a las 12 de la noche del 14 de julio. El cierre lo marca la canción popular de despedida “Pobre de mí”.
En dicho evento, se hace protagonista la adrenalina, que se produce al saltar una valla para correr delante de seis toros bravos poniendo en parte la vida en peligro. Además de ésta, se reúnen otras muchas como torneos, conciertos o actuaciones de cabezudos.
Algunos de los lugares más visitados de Pamplona son la catedral de Santa María la Real, gracias a sus múltiples influencias, en la que podemos ver una fachada realizada mediante carpintería exterior de estilo neoclásico, con un templo interior gótico. Otras de las visitas más interesantes es la que tiene lugar hacia la Casa Consistorial que cuenta con una carpintería exterior de estilo barroco con columnas de estilo clásico.
La fiesta de los San Fermines, ha traspasado fronteras, de tal forma que en Nueva York, un grupo de amigos comienzan a celebrar sus propios San Fermines en un bosque, donde se reúnen con un toro e intentan divertirse con él. Tal vez, el primer paso para que esta fiesta sea celebrada internacionalmente por cada país, aunque por ahora, la popularidad de los San Fermines españoles, causa furor en todo el mundo.
A pesar de toda la diversión que este evento trae, entre el asfalto de las calles y los hogares, se encuentran tanto agentes del cuerpo policial, como vallas con la misión de proteger la carpintería exterior propia de las casas, mobiliario urbano y todo el trabajo invertido en decoración de las calles.